Ojala pudiera poner en penitencia mi paciencia, para no esperarte.

jueves, 27 de mayo de 2010

Ni idea.


Ósea, me pidieron para una tarea que busque a una especie de ídolo. Alguien a quién imitar en mi adolescencia, o solamente con quién me identifico. Yo lo puse a mi hermano y a Fito, pero de verdad no me identifico con ellos, yo quiero ser yo y nadie más. Sin copiar a nadie. Quiero ser yo, Vale, nadie más. Ni siquiera ser Vale, no ser nadie o ser todos a la vez, pero ¿por qué alguien en particular? ¿por qué un famoso? ¿por qué un conocido?
Nuestros ídolos tenemos que ser nosotros mismos y a la mierda, ¿a quién le importa alguien más?
Si yo me parezco a mi hermano, es porque tenemos los mismos padres. Si me parezco a Fito es porque compartimos cosas: el amor a la música y la forma de ver las cosas.
¿Importa algo más?
Yo no quiero parecerme a nadie, y que nadie se parezca a mí.
Quiero ser yo, y nadie más. O quiero ser todos en uno solo. Pero ser alguien al fin y al cabo.

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